lunes, 15 de marzo de 2010

Tan en serio no tiene gracia

¿Porqué hay tanta gente que se toma las cosas tan en serio? ¿Acaso no pueden solamente ser ellos mismos y dejar que la vida simplemente fluya? Me da demasiada flojera mental pensar que miles de millones de personas, se la pasan preocupadas por mil y un cosas cuando lo más importante está sucediendo justo frente a sus ojos, pero nunca lo ven (o nunca lo vemos).

Es desesperante el ver como medio mundo literalmente, se sumerje en un mar de complicaciones (a veces, lo admito, ni yo mismo me escapo de ese vicio) sin detenerse un segundo a respirar, y a pensar en: no se, en hacerle un comentario amable a alguien, en bromear un poco, en reirse de los errores, en simplemente ¡no tomar la vida tan en serio!

Un amigo en el trabajo, tiene una frase pegada en su lugar que dice (espero citarla bien): "Life is too short to be taken seriously". ¡Qué verdad tan grande! ¿De qué nos sirve vivir en el amargue por todo? El trabajo, el tráfico, el calor, los amigos que se fueron (o dejamos ir), el dinero, el cansancio, vaya; muchas cosas que no hacen más que hacernos perder tiempo valioso pensando en ellas.

Creo que independientemente de si el día de trabajo fué bueno o malo, si me robaron mi dinero, si se descompuso el coche o lo que sea, lo que realmente importa es: ¿tuve tiempo de reirme de las cosas el día de hoy? o ¿me la pasé todo el tiempo quejándome? Yo quiero responder que si a la primera pregunta y que no a la segunda la mayoría de las veces.

Pero bueno, el que quiera preocuparse es libre de hacerlo, eso se los dejo a ustedes... Yo por hoy, me despido como siempre (o casi siempre) detrás de la pantalla de cristal líquido y escribiendo una vez más desde el exilio.

Omar

jueves, 11 de marzo de 2010

En el exilio

Las tardes y las noches parecen eternas,
mi mente vuela poco, pero así viaja.
Es como si los días duraran el doble,
y cuando pienso en ella, la espera mata.

Omar

miércoles, 3 de marzo de 2010

...y ahora

¿Recuerdan el rollo de la idea de moda? Bueno, pues después de pensarlo y pensarlo y después de eso, volverlo a pensar. Creo que finalmente he llegado a una desición. Y esa es que ésta vez, si le voy a hacer caso a la idea de moda. De esa manera, ya no será una idea de moda más, sino una realidad.

Mi idea tiene que ver con una escuela, muchos sábados, muchos libros y 5 años. El viernes pasado fuí al lugar indicado a preguntar un poco más acerca de eso que tengo en mente, y pues la verdad es que salí muy contento, pues todo me sonó mejor de como me lo imaginaba.

Los detalles vendrán, cuando tengan que venir...

Por ahora, me despido como casi siempre, detrás de la pantalla de cristal líquido.

Omar