sábado, 22 de agosto de 2009

Insomnio

Son las 02:00, y sigo aún sin que pueda decidirme a dormir... Pareciera que es muy fácil perder el tiempo. A veces no comprendo qué es lo que me hace estar tanto tiempo sin hacer nada, nada de nada. Hoy transcribiré algo que ayer escribí mientras trataba de dormir.

Demasiada Lluvia Sobre el Paraiso (Agosto 21, 2009 - 00:15hrs)

Llueve, y los relámpagos se escuchan a la distancia mientras que un sin fin de pequeñas cataratas hacen eco en la terraza al detener su carrera contra el suelo ya mojado.

Sonidos de lluvia, viento y de vez en cuando el estallido de una luz y luego el rugido del trueno.

No puedo dormir así, son 15 minutos después de la media noche y con todo este ruido no puedo conciliar el sueño.

Ojalá el ruido fuera sólo el de la lluvia... Hoy fuí a ver a C. después de tres semanas de descanso. Y vaya que ésta vez me he quedado pensando en todo lo que dije durante mi breve terapia semanal. ¡Es iluso pensar que en breves 50 minutos se pueda hablar de toda una vida de malas costumbres! De cualquier manera, iluso o no, es muy útil: mucho en verdad. Sigo confirmando la efectividad de esos breves minutos. ¡Vaya que han habido cambios, buenos y muchos!

- La lluvia ya no se escucha, pero las cataratas no dejan de sonar aún, debe haber mucha lluvia en el tejado todavía. -

C. dice que no necesito hacer cosas extraordinarias para con la gente en particular. Pero yo creo que a veces las cosas extraordinarias si son necesarias. Además: las cosas ordinarias cualquiera las hace. En cambio las extraordinarias sólo las hacen las personas que realmente quieren marcar una diferencia. Yo quiero ser así, y no voy a cambiar de parecer.

- Cada vez las gotas de lluvia se escuchan menos y menos. No lo he mencionado pero hoy justo antes de comenzar a escribir esto: estaba a punto de conciliar el sueño cuando de repente sentí que la tierra se movía. -

Es como si toda la tierra se hubiera dado cuenta de que necesito una buena sacudida para romper viejos esquemas y caminar sobre nuevos terrenos. Ésta vez, más amigables.

Final de la transcripción.

Algún otro día sin poder dormir, tal como hoy y como ayer, me puse a dibujar (si, otros de mis horrendos hobbies) y mientras hacía bocetos de cosas que me gustaría mejorar, hice uno que personalmente me gustó mucho. Se llama "Glass & Wine", y lo pueden ver aquí abajo.



La verdad es que es muy sencillo pero no se porqué me "enamoré" tanto de este dibujo que no lo puedo dejar de ver. Me gustaría poder tener tiempo para dedicarme más a mis gustos... Voy logrando eso poco a poco, poco a poco.

Finalmente me comienza a dar un poco de sueño, trataré de dormir...

Si llegaron hasta éste punto sin aburrirse: ¡gracias!

Si no, ¡pues no!

A todos: hasta luego.

Omar

lunes, 3 de agosto de 2009

Atrapado

Hoy está siendo uno de esos Lunes en los que odio venir a trabajar. Se siente como si el último lugar en todo el planeta donde quisiera estar, es aquí en medio de toda esta gente que aletargados seguimos el sonido del tambor.

Yo lo que quiero es estar en mi casa, viendo la televisón y comiéndo unos ricos cacahuates con limón y salsa maggi, ahhhh que rico. Eso si es vida de lunes, y no el estar encerrado en la oficina. Y para colmo de males, se acaba de soltar el diluvio que vino. ¡Chingaáo!

De cualquier manera, el punto es que a veces me siento simplemente como uno más dentro de la masa de gente que sigue caminando sin metas, ni rumbo, ni ilusiones... Yo no quiero eso, yo si tengo ilusiones ¡y muchas! No se si mis metas sean lo suficientemente ambiciosas para alguien de mi edad, pero si las tengo, de verdad. Sigo soñando y eso nunca lo dejaré de hacer aunque el mundo intente decirme lo contrario en cada parpadeo de ojos, ¡me vale! Y es más, incluso si tuviera que mojarme ahorita para llegar a mi carro si la lluvia no parara, no me importa, eso es parte de estar aquí e intentar disfrutar la vida. Cada momento, cada sitio, cada pensamiento y sentimiento, todas esas cosas construyen poco a poco el "jenga" de la vida.

Pero en días como hoy, en días como hoy que me siento encerrado, atrapado y detenido en el mismo lugar de siempre, es difícil ver todo lo que está paralelo a mi efímera existencia en esta oficina. Lo que quiero es estar allá afuera, quiero tomar fotos, plasmar los momentos en imagen, dibujar las ideas y dejar fluir todo.

Creo que necesito vacaciones... Miro a la ventana y me doy cuenta de que la lluvia está cesando poco a poco. Talvés sea buen momento para comenzar a cerrar todo por hoy. Mañana, espero, será una historia diferente.


Omar